Turtleneck, el legado de la ropa

Para algunos “cuello de alto vuelo”, para otros “cuello alto”, “cuello de cisne” o simplemente “cuello tortuga”, así conocemos este tipo de cuello redondo y ceñido que hoy en día ha dejado de ser apretado y asfixiante para convertirse en uno más amplio y suelto sin dejar el honor a su nombre y la connotación de elegancia.

Lo que tal vez no sabíamos es que esta prenda tiene toda una historia fascinante pues es conocida por ser unisex y puedo decir que esto es lo que más me gusta actualmente en la industria, el saber que las prendas ya dejaron de ser para hombre o para mujer, los colores, el rosa ya no es nuestro chicas, me alegra saber que jamás lo fue y el cuello tortuga fue parte de toda esta revolución y liberación de la mujer; este cuello apareció en 1890 especialmente para la ropa de deporte, ¿quién lo creería? Se usaba para los deportes al aire libre y en los 50’s era utilizado para el golf y el hockey, pero si recuerdan bien este tipo de cuello era fielmente utilizado por los trabajadores como vigilantes entre otros cargos del pueblo ya que protegía fuertemente del frío.

Pero el cuello tortuga no fue solo una liberación para las feministas y las ganas de adoptar un estilo unisex con la esencia Chanel, también este cuello liberó a los hombres del formalismo de la corbata y año tras año el alto de estos suéteres cambiaban por parte de los diseñadores hasta el punto de concentrarse en que el cuello se convirtiera en algo unisex en su máxima expresión produciéndose en vestidos.

Años después, en los 80’s el cuello tortuga bajo y volvió a ser reemplazado por la corbata pero los diseñadores como Raf Simons no se rendían ante la muerte de este cuello y empieza a ser utilizado por los políticos reemplazando nuevamente el estilo asfixiante para muchos hombres con camisa y corbata.

“Cuando Nicolas Sarkozy adopta un look tranquilo, usa el cuello alto negro, y es sin duda la elección de indumentaria que le va a él mejor” – Florencia Muller

En 2011 Hermès y Lanvin presentan después de un buen tiempo una propuesta del cuello tortuga como una segunda piel retomando a los 60’s y 70’s cuando esta segunda piel – cuello tortuga – era asociada al fetichismo sexual, pero no solo ellos fueron los encargados de devolvernos esta prenda al armario, también hicieron parte de esta tendencia Dolce & Gabbana, YSL, Louis Vuitton.

Por último después de unos 2 años nuevamente Hermès, Ermenegildo Zegna, Berlutti, Valentino y Céline nos recuerdan por qué el cuello tortuga debe volver con una connotación de poder para quien lo use recordándonos que los grandes de la historia han sido los encargados de casarse con esta prenda como Steve Jobs, Audrey Hepburn o Marilyn Monroe. ¿Y ustedes cómo lo usarían?

Turtleneck: Forever 21.
Culotte: Forever 21.
Shoes: Zara.
Septum: Suheir Rashid 
Sunglasses: Toscani